domingo, 22 de diciembre de 2019

Vértigo

Reconozco ese umbral. Una vez, lo atravesé primera. Me habían dado un tierno empujón, pero me dejaron sola del otro lado. No hubo caso: no vinieron.
Reconozco ese umbral. Alguien me toma la mano. No está detrás, no quiere empujarme. Parece valiente y dispuesto a cruzarlo en el instante en que lo miro.
Reconozco ese umbral. Empiezo a reconocer su nuca delante de mí, alejándose brevemente, hasta que avanzo también. Qué valiente es andar.
Intuyo lo que se aproxima: contacto externo de dos almas que ahora quieren dialogar y que se besan y que se buscan y que se dicen promesas al oído.

No dije

No dije "Te amo". ¿Habría necesitado decirlo alguna vez? Me había dado una inevitable sensación de que no, de que esas palabras no querría decírtelas, de que tanta entrega era injusta. Pero estuvo a la orilla de mi boca muchas veces, latiendo delatoramente, llenándose de dudas los espacios entre fonema y fonema.
No dije "Te amo". Decir, no gritar, callar. Un debate interno. Un debate antiquísimo. Un debato que no quería que existiera. Y hubo, hubo todo el tiempo. Poder decir es no dudar. ¿De qué? De que habrá una respuesta, de que habrá valentía de vuelta. Pero latían más las dudas que los sintagmas delatores.
No dije "Te amo". Lo celebro. Dudar, callar, matar. Los sentires que no se dicen se mueren en una especulación. No poder decir es saber que no habrá sentires de vuelta. Yo elijo quién mata los míos: no decir es erigirme como autora del crimen. Ha latido más el "para mí" que el "para vos".

Imaginaria

Quisiste haberme imaginado. Imaginaste, entonces, mis ojos sensuales, unos labios que procuraban besos tuyos, un cuerpo que fantaseaba con el rigor de tus dientes. Imaginaste, entonces, una voz dulce y sugerente, una gracia constantemente alegre, unas palabras pronunciadas siempre con emoción.
Quisiste haberme imaginado. Me dio tristeza y lo dije. Y respondiste que no era imaginaria. No eran imaginarias mis manos cariñosas, ni mis pies inquietos, ni mi mente bailarina. No era imaginario, sobre todo y en ningún momento, este corazón latente, poeta y apasionado. No eran imaginarias, por ende, todas las promesas que palpitaban en él.
Quisiste haberme imaginado. Te dije que no. Coincidiste. Sin embargo, te convino. Mejor, que fueran imaginarios mis inmensos sentimientos. Mejor, que fueran imaginarios mis tímidos proyectos. Mejor, que fueran imaginarias mis lealtades, mis valentías e incluso el trayecto de esta sombra que no va a pintarse en el suelo que pisás.

sábado, 14 de diciembre de 2019

Ojo gitano

Te suplico que me mires los labios cuando hablo:
llevan menos verdad, llevan menos horror que mis ojos.
Te suplico que me mires el cuerpo cuando hablo:
puede fingir, puede temblar, puede seducir a tus manos.
Te suplico que no mires mis ojos cuando hablo:
no bailan y conocen la finitud de todas las historias.
Miran y sospechan.
Miran y adivinan.
Miran y saben.
Y no quiero saber:
si mañana te quedás,
si mañana te vas.
Te suplico que escondas tus ojos cuando hablo:
prediré una ficción en la que no hay último beso.

viernes, 13 de diciembre de 2019

Estructura sobre verde

Te miro de pronto, en silencio,
entre cuatro paredes artistas.
Te entretienen obras confusas
y entonces llego a robarte
un beso
una tomada de manos
una caricia fugaz.
Nos queremos frente a garabatos
y una "Estructura sobre verde",
también en silencio,
nos da la excusa para reír
y mirarnos las risas
y reírnos en otro beso
hasta las tres de la tarde.

lunes, 9 de diciembre de 2019

Como corresponde

Parece que finalmente existe, que no es un mito, que sucede.
Parece que no acepta la simple categoría de sueño inalcanzable.
Parece que un día aparece y perturba el terrible balance:
y te mira como corresponde
y te toca como corresponde
y te nota como corresponde.
A enteras, no a medias.
De lado a lado.
De ida y también de vuelta.

Colección

Yo estaba empeñando mi alma por un pedacito de amor.
Un pedacito, nada más humilde que un poco de besos.
Y a cambio te estaba poniendo a la mano la chance:
esa oportunidad de retractar una vida con un acto de bondad.
Un trueque desproporcionado, como todo lo que me gusta dar.
Tal vez te diste cuenta antes y por eso lo dejaste ir de repente.
Y entonces no hubo retracción: completaste la colección.

domingo, 1 de diciembre de 2019

Fantasías

Todas las noches planificaba:
quiero mirarlo a los ojos mucho tiempo
quiero hacerle el amor todas las veces
quiero dormir en sus brazos calientes.

Todas las noches planificaba:
va a saber que me río a cada rato
va a saber que mi piel siente cosquillas
va a saber montones de primeras veces.

Todas las noches planificaba:
quiero quererlo
va a saber que lo quiero
voy a querer que me sepa.

Pero no quiso.
Tampoco sabrá.

lunes, 18 de noviembre de 2019

Fénix 3

La Luna me había moldeado para que:
mi cuerpo tuviera la medida de tus manos;
mi cabello tuviera el baile de tu aliento;
mis besos tuvieran el sabor de tus besos.

La Luna me había moldeado para que:
mis huellas siempre cupieran en tus pies;
mis ojos se expropiaran tus miradas;
mis gemidos fueran ecos de tus gritos.

La Luna me había moldeado para que:
te quisiera a pesar de mí;
te esperara a pesar de mí;
te perdonara a pesar de mí.

Elegimos otro molde igual de maleable.
¿Todavía me besarías?
¿Todavía gritarías conmigo?
¿Todavía pedirías perdón?

Entonces sigo midiendo lo mismo.

jueves, 14 de noviembre de 2019

Fénix 2

Tengo unos ojos apresurados por mirar el mundo.
Tengo un cuerpo excitado por tocar el mundo.
Tengo una calma que me late en el pecho.

Todavía no sé a quiénes obedece o no atiende mi voz.
Todavía no sé a quiénes besarían o ignorarían mis labios.
Todavía hay una calma latente en mi pecho.

Me arropan los poemas de amores en que no creo.
Me arropan unas caricias que no me rozan siquiera.
Me arropa esta calma latiéndome en el pecho.

De la calma renace esa mujer suave que supo antes ser colibresca. De la calma renace ese corazón amante que supo antes ser colibresco. De la calma renace esa calma que supo antes ser colibresca.

lunes, 11 de noviembre de 2019

Fénix

Canta la primera estrella fugaz una canción de amor.
Despierta de nuevo la Luna de su sopor triste.
Canta la última estrella fugaz una canción de amor.
Amasa de nuevo la Luna un cuerpo de mujer.
Canta el Sol una canción de amor.
Gesta de nuevo la Luna un espíritu de fénix.

Y lo echa a la Tierra de los hombres.

domingo, 10 de noviembre de 2019

Colibrí 100

El llanto me ocupa todo el cuerpo, es verdad.
Igual que el alma...
Igual que el vuelo...
Igual que las miradas...
El llanto me ocupa todo el cuerpo.
Igual que el alma.
El llanto me ocupa todo el vuelo.
Igual que las miradas.
El vuelo me ocupa todo el cuerpo,
el vuelo, el alma, pero...
Tengo las alas pequeñas, muy pequeñas...
No podría acariciarte bien, lobo.

Colibrí 99

Y dentro de un cráter hay una mujer.
Y dentro de unos ojos hay un colibrí.
Y dentro de un colibrí hay una voz.
Es una voz que dice recuerdos.

Y dentro de un cráter hay una mujer.
Y dentro de una boca hay un colibrí.
Y dentro de un colibrí hay una canción.
Es una canción que dice recuerdos.

Y dentro de un cráter hay una mujer.
Y dentro de una mujer hay un cráter.
Y dentro de un cráter hay un colibrí.
Es un colibrí que dice recuerdos.

Colibrí 98

Tal vez haya constelaciones cantando en aullidos.
Tal vez haya constelaciones aullando en canciones.
Procuran traducir lo que pasa.
Procuran traducir lo que siento.
Procuran traducir lo que ves.

Tal vez haya constelaciones cantando en aullidos.
Tal vez haya constelaciones aullando en canciones.
Procuran traducir lo que no pasa.
Procuran traducir lo que temo.
Procuran traducir lo que dudás.

Tal vez haya constelaciones cantando en aullidos.
Tal vez haya constelaciones aullando en canciones.
Procuran que entendamos otra vez.

Colibrí 97

Al borde de la Luna parece haber alas.
Al borde de la Luna parece haber pico.
Al borde de la Luna parece haber voz.
Es una voz que no dice recuerdos.

El Lobo sigue aullando a la Luna llena.
El Lobo sigue llamando a la Luna llena.
El Lobo sigue preguntando a la Luna llena.
Es una voz que sí dice recuerdos.

Ya no saben hablarse.
La Luna susurra una canción de amor.
El Lobo aúlla un dilema.
Son voces que sangran recuerdos.

Colibrí 96

La Luna se lleva la noche consigo y conmigo.
La Luna le roba la noche y a mí.
La Luna calla la noche.
La Luna me esconde a mí.

Y el Lobo la mira y no sabe.
Y el Lobo la mira y no entiende.
Y el Lobo la mira y no vuela.
Y entonces aúlla.

Pero la noche ya no tiene oídos de Luna.
Pero la noche ahora tiene oídos de colibrí.

Colibrí 95

Dejo un ala atrás.
Y me pierde (de vista).

Dejo un rastro de sangre.
Y me pierde (de vista).

Dejo una mirada atrás.
Y me pierde (de vista).

Dejo un canto de sangre.
Y me pierde.

Colibrí 94

Luna: "No dice porque no sabe".
Digo porque sé.
Luna: "No dice porque no entiende".
Digo porque entiendo.
Luna: "No dice porque no vuela".
Digo porque vuelo.

Es cierto:
no sabe (todavía);
no entiende (todavía);
no vuela (todavía).
Y yo vuelo.
Y me pierde (de vista).

Colibrí 93

Confundí tus aullidos con una canción de amor.
Y entonces volaba y también podía cantar amor.
Pero no dijiste que sí y no dijiste que no.
Confundí tus aullidos con una canción de amor.

Me desgarraste y sentí caricias.
Me mordiste y sentí besos.
Me mentiste y sentí verdad.

Confundí tus aullidos con una canción de amor.
Pero no dijiste que sí y no dijiste que no.

Colibrí 92

Cuando abrís tu corazón ante alguien más, le entregás un cuchillo y el derecho a usarlo.
Y yo además cerré los ojos en todo momento y solo volví a abrirlos cuando sentí la puñalada.
Entonces supiste que yo había tomado el cuchillo por el filo, lastimando mi mano antes que tu corazón.

Colibrí 91

La garra se desliza por mi pecho mientras te miro a esos ojos de lobo feroz.
La garra se desliza por mi pecho y me detiene las palabras al borde del pico.
La garra se desliza por mi pecho y lo abre lentamente de par en par.
Se me dilatan las pupilas.
Duele, duele, duele.
Se me fugan las lágrimas.
Duele, duele, duele.
Mi corazón está clavado ahora.
La garra me cala extremadamente hondo pretendiendo partirme en dos más.
La garra me perfora un corazón no físico y me extirpa también la voz.
La garra se desliza por mi alma y la mata lentamente de par en par.
Tu garra dice: "Te miento".

Colibrí 90

Hablan. Hablan fuerte. Son voces fuertes, voluminosas, tangibles.
Sin embargo, escucho: "Te quiero".
Sin embargo, escucho: "Te adoro".
Sin embargo, escucho: "Solo con vos".
¿Qué significa? ¿Qué significa, Luna? ¿Qué significa todo esto?
Y tus ojos dicen: "Te quiere".
Y tus ojos dicen: "Te adora".
Y tus ojos dicen: "No sé".
Hablan fuerte. ¿Qué significa todo esto?
Y sus garras dicen: "Te miento".

domingo, 3 de noviembre de 2019

Colibrí 89

Los he visto, Luna, los veo todo el tiempo:
se recrean en mi belleza y mis dones,
se están recreando todos esos varones.

Los he visto, Luna, hasta me hacen oír:
dicen que me quieren y me admiran,
están diciendo mis palabras preferidas.

Los he visto, Luna, hasta podría tocar:
tienen pies, tienen manos, tienen ojos;
miran, andan, rozan y están rotos.

Los he visto, Luna: no aúllan.

Colibrí 88

No me advertiste, Luna, sobre las oceánicas dimensiones de las dudas, de los llantos, de los miedos, del amor.
No me advertiste, Luna, que todas estas palabras de dolor podrían alguna vez doblarme en masa y altura.
No me advertiste, Luna, que cuanto más quisiera cantar un poco de amor, tanto más iba a querer llorarlo después.
No me advertiste, Luna,
que hasta ahogada de penas
solo puedo cantar esa canción.

Colibrí 87

Y esas voces interfiriendo
y contando historias confusas
no tienen ninguna flecha para lanzar
porque ya no importan
porque ya no llegan
porque tu voz ambigua sí me mató.
Dije palabras que había olvidado
con miedo
con dudas
y no aullaste que sí
y, detrás de tu lengua,
quería asomarse un no.
Y esas dudas interfiriendo
y temblando en todo mi cuerpo
no tienen ninguna palabra para lanzar
porque ya no importan
porque ya no llegan
porque tu voz ambigua insinuó que no.

Colibrí 86

No me explicaste nunca, Luna,
no pude saber antes, Luna,
que las dudas tienen matices.

Puedo dudar, entonces, de miedo.
Puedo dudar, también, de celos.
Puedo dudar, incluso, de dudas.

No me explicaste nunca, Luna,
no pude saber antes, Luna,
que además puedo dudar de amor.

Colibrí 85

Luna, tengo bastante miedo:
¿qué me deja tan indefensa?
¿qué me expone tan vulnerable?

Luna, tengo bastante miedo:
siento muy nuevo este querer,
es tal vez un querer de mujer.

Luna, tengo bastante miedo:
quiero y tiemblo, dudo y quiero,
dudo y tiemblo, quiero y quiero.

Luna, Luna, Luna:
¿y si no dice que sí?
¿y si dice que no?

Colibrí 84

Quepo todavía entre tus fauces.
Quepo incluso entre tus garras.
¿Podré cerrar los ojos otra vez?

Quepo todavía entre tus dientes.
Quepo todavía entre tus patas.
¿Querés que cierre los ojos otra vez?

Tengo las alas pequeñas, Lobo.
Tengo el pico pequeño, Lobo.
Y un querer que me deja indefensa.

Colibrí 83

Escucho una historia confusa.
Soy un colibrí pequeño.
Las dudas crecen enormemente.
Soy un corazón pequeño.

Escucho una historia confusa.
Mi corazón late rápido.
Tus voces son amiguas y fuertes.
Las dudas laten rápido.

Escucho una historia confusa.
Escucho muchas historias confusas.
Soy un colibrí pequeño.
Soy un corazón pequeño.
Tus voces son ambiguas y fuertes.
Tus voces dicen y no esclarecen.
Las dudas crecen rápido.
Las dudas laten rápido.

Colibrí 82

Tenés orejas grandes, Lobo,
y quieren que escuches:
que escuches todo ese bullicio,
que dejes de escucharme cantar.

Tenés orejas grandes, Lobo,
y quieren que escuches
y quieren que escuchemos
y quieren que deje de cantar.

Tenés orejas grandes, Lobo,
y una voz de sonidos ambiguos
y yo escucho y dudo
y entonces dejo de cantar.

Colibrí 81

La música lagrimal se detiene.
A veces se detiene.

Duele, pero es paz.
Duele, pero es calma.

La música lagrimal se detiene.
A veces se detiene.

Ahora empiezan las interferencias.
Y no hay paz, ni calma.

La música lagrimal se detiene.
Esta vez se detiene.

Y suenan animales ajenos sin sentido.
Y quiero mi paz y mi calma.

jueves, 31 de octubre de 2019

¿Cuántos?

Se me desgajan los amores, el corazón y hasta los temores. Duermo. Pesadilla. Duermo. Pesadilla. No duermo. Pensamientos agolpados y un terror inmenso mantienen mis pupilas reveladas.
Y lloro y grito porque duele, porque quema, porque me estoy resquebrajando. ¿Cuántos océanos podrían caberme? ¿Cuántos, entre la que todavía cree y ama y la que ya se rinde, la que ya se dobla, la que ya se derrumba?
Y lloro y grito y beso esa almohada que tampoco puede quererme. Y me doblo como un tríptico, pegando la cara a las rodillas para esconderle la vergüenza a la soledad. ¿Cuántos, entre la máscara y la verdad?
Se me desgajan los humores, la razón y hasta los honores. No duermo. Pesadilla. Duermo. Pesadilla. Ahora temo dormir y temo estar despierta. ¿Cuántos, entre la durmiente y la lúcida?

domingo, 27 de octubre de 2019

¿También?

¿Sabés?
Hace un tiempo le conté. Le dije "Lo quiero, lo quiero mucho". Porque es cierto, te quiero, te quiero mucho.
Nadie lo duda, ¿viste? Nadie duda que yo te quiera mucho. Nadie duda que voy a quererte mucho tiempo.
Creo que ni siquiera dudan que esté enamorada. Lo asumen sin que lo diga. Porque yo no digo tanto a veces.
Y no es que no puedan dudar. Porque sí dudan sobre otras cuestiones. Por ejemplo, dicen "Espero que él también".
Está muy bien dudar y decir "¿Y es recíproco?", pero a veces no se dan cuenta de que les respondo y lloro a escondidas.
Sé que debería sentirme halagada por emanar esa imagen de amor incondicional, pero me hacen sentir la arrastrada.
¿Sabés?
Creo que a veces digo que te quiero con la esperanza de que me respondan que menos mal, que se nota que vos también.

jueves, 24 de octubre de 2019

CASI SIEMPRE

Casi siempre...
Casi siempre, me quedo un rato más.
Por si vuelve.
Por si llama.
Por si me necesita.
Por si quiere decirme que me quiere,
una vez más,
antes de que me duerma y no sepa,
y no sepa si mañana despierto
o dejo de llorar.

domingo, 20 de octubre de 2019

De acentos y tiempos

Te quieren en varios acentos. Te dicen: Te quiero. Pero no se nota hasta que dudan y te preguntan: ¿Me querés? ¿Me quieres? ¿Me querrás? ¿Me querías? ¿Me querrías...? Te quieren en otros acentos y dudan en todos los tiempos, modos y aspectos verbales, sin animarse a la condición: Si fuera distinta, si viviera en otro lado, si tuviera más noches de vida...
También yo te pregunto. Te digo: Te quiero. No hay signos de pregunta ni segundas personas, pero te digo que te quiero y en realidad te estoy preguntando si también me querés a mí. Sin esas condiciones. Sin futuros o pasados. Sin subjuntivos. Te estoy preguntando si me querés a mí ahora, como existo ahora, como te quiero ahora.
Entonces respondés "Te quiero" o no respondés nada y sé que estás tranquilo, como toda persona que no ha necesitado preguntar y que a veces toma la iniciativa sin saber que está preguntando.

domingo, 6 de octubre de 2019

Más palabras

Ojalá supiera decir más palabras.
No nos confundamos:
soy un cuerpo que almacena palabras,
soy un cuerpo que emite palabras,
soy un cuerpo que hace palabras.
Pero quisiera decirte "Perdón"
y que me entendieras todo.
Pero quisiera decirte "Gracias"
y que me entendieras todo.
Pero quisiera decir "Te amo",
quisiera decir, quisiera poder decir.

Yo sí te voy a mentir

Yo sí te voy a mentir:
voy a decirte que no he llorado
y que he dormido muy bien
y que no se me ha olvidado comer;
que no estuve preocupada
y que no me duele la cabeza
(de tanto pensarte);
que tampoco estoy triste
y que no se me parte el pecho
y que no sé levantarme de acá.
Yo sí te voy a mentir
porque todas esas verdades son pequeñas
y no importan y no pesan
o no importarán ni pesarán
mañana.

miércoles, 2 de octubre de 2019

Y latir después

No te voy a mentir:
mi corazón se parte a tu lado.
¿Cómo puede partirse tantas veces?
Y latir después, como si nada.
No te voy a mentir:
mi corazón se parte a tu lado.
Y entonces aparecés queriéndome.
O diciendo poemas
que inventás sobre la marcha
y que suenan a palabras comunes.
No te voy a mentir:
mi corazón se parte a tu lado.
A veces duele mucho.
A veces solo causa gracia.
Me voy y me quedo y te sueño.
Porque se parte de vida,
de poder querer,
de poder quererte.
¿Cómo puede quererte tantas veces?
Y latir después, como si nada.

jueves, 19 de septiembre de 2019

Vulnerante

Tu voz me vulnera.
Corrompe mis carnes.
Me impone el deseo.
Me rasguña tu voz.

Tu voz me desnuda.
Abraza mis partes.
Me acaba el aliento.
Me azota tu voz.

Tu voz me penetra.
Altera mi sangre.
Me invade el centro.
Me somete tu voz.

Y me enseña a gruñir.
Y me enseña a chillar.
Y me enseña a pedir más.
Me vulnera tu voz.

lunes, 9 de septiembre de 2019

Colibrí 80

La almohada se cansó.
La lágrimas me hacen pesada, dice.
La tristeza me agiganta, dice.

La almohada se cansó.
Mi llanto no la deja dormir, reclama.
Mi angustia la desvela, reclama.

La almohada se cansó.
Y mis párpados también.
Y mi garganta también.

Dame un abrazo, Luna.
Secame toda el alma.
No quiero hundir más la cama.

domingo, 8 de septiembre de 2019

Ceguera

No puedo hablar de gente bonita. Gente bonita. ¿Qué es? No veo. No puedo ver. Antes veía. No quise ver. Quise no ver. Dejé de ver. Gente bonita. ¿Por qué bonita? ¿Qué me dan? No pasa por mí, pero igual. Una imagen. ¿Para qué? Si yo no veo. No me causa nada. Gente bonita. ¿Hacen bien? Entonces, millones de veces bonita. ¿Dicen bien? Entonces, miles de veces bonita. ¿Piensan bien? Entonces, cientos de veces bonitas. No puedo hablar de gente bonita, si no estoy hablando de gente buenita. La diptongación revela ideología. Gente buenita. Sí veo. Siempre veo. Incluso ciega.

jueves, 5 de septiembre de 2019

Colibrí 79

Tuve miedo de enfriarme.
De enfriarme, doblarme y partirme en dos.

Tuve miedo de doler.
De despertarme a doler y querer dormir.

Tuve miedo de mí.
De enfriarme y doler y desconocerme.

Y desconocerme el corazón.
Y desconocerme las intenciones.
Y desconocerme
los ojos partidos,
el alma pausada,
la fe sin sabor.

viernes, 16 de agosto de 2019

Minuto cero

Yo me desvelo por vos.
¿Y qué?
Nadie me lo pide.
Si me lo pidieras...
Ni siquiera dormiría.

Yo me desvelo por vos.
¿Y qué?
Nadie me lo pide.
Y también te sueño.
Tantas noches te sueño...

Yo me desvelo por vos.
¿Y qué?
Nadie me lo pide.
Sin embargo, en el minuto cero
me vuelvo a desvelar.

jueves, 25 de julio de 2019

Jueves 26 de julio

Estuve contando días como pétalos de margaritas.
Cualquier día, "Me quiere".
Jueves, "No me quiere".
Estuve deshojando calendarios llenos de jueves.
Otros días no vienen.
Jueves, "No me quiere".
Estuve sumando jueves de desgracias y bochornos.
De viernes a miércoles, no duele.
Jueves, "No me quiere".

Sin embargo...

Las noches de los jueves son largas.
Y hubo una noche muy noche.
Y hubo unas garras muy garras.

Las noches de los jueves son serenas.
Y hubo una noche muy profunda.
Y hubo dos cuerpos que besan.

Las noches de los jueves son rojizas.
Y hubo una noche muy lujuriosa.
Y hubo sábanas escurridizas.

El varón se mostró lobo.
La mujer reveló colibrí.
El jueves dijo: "Propongo".
Y la luna dijo que sí.

Desde entonces...

Estuve contando jueves como arrugas en cama amante.
Los otros días me quiere.
Pero me quiere desde el jueves.

Noche caricia

Todas las noches lloro.

Las palabras de los días se convierten en sueños residuales donde muero, apuñalado lado a lado mi corazón.

Todas las noches grito.

No existen las dudas, pero me abruman tormentas de preguntas que quise hacerte y no respondiste jamás.

Todas las noches duelo.

Escucho los latidos del miedo contra mi pecho seguro y naufrago en mis propias lágrimas agridulces.

Todas las noches.

Pero habrá una noche, noche suave y caricia, donde las palabras del día, donde las tormentas, donde el miedo sepultes debajo de mis párpados al cerrarlos y echen a volar cuando los abra para mirarte dormir.

domingo, 14 de julio de 2019

Honores

Yo no pedí:
que casi todo saliera bien,
que casi no hubiera dolor,
que todo fuera tan provechoso.

Yo no pedí.
Mi voz no intervino.
Mi voluntad vino después.
Mi voto fue un sí al buen tino.

Pero yo no pedí.

A cada honor:
una cuota de bondad,
una paciencia infinita,
una gran roca de culpa.

A cada honor:
un sufrir en silencio,
un llanto que no vale,
una canción que no debo cantar.

Pero yo no pedí.

¿Qué más tributo pagaría
si en efecto hubiera pedido?
Una vida entera no parece alcanzar.

Pero yo no pedí.

Yo no pedí:
ni estos honores,
ni todos los otros
que callada y puntual retribuyo.

sábado, 6 de julio de 2019

Precuela

Ya era increíble antes de conocerte.
Disfrutaba leyendo poesía.
Mis ojos se colmaban de lágrimas ante el más mínimo espectáculo.

Ya era increíble antes de conocerte.
Cantaba mucho a escondidas.
Mis manos estaban siempre calientes y sabían acariciar.

Ya era increíble antes de conocerte.
Pensaba en las cosas finitas.
Mi cuerpo me llevaba de un lado a otro, sin cansancio alguno.

Ya era increíble antes de conocerte.
Soñaba con todas las islas.
Mi pecho ya había amado sin miramientos ni límites.

Pero...
Es increíble también
estar en tu brazos y en tus miradas y en tus besos.

miércoles, 3 de julio de 2019

Colibrí 77

Hembra.
Con cuerpo de hembra.
Con voces de hembra.
Con deseos de hembra.
Hembra.
Para despeñarnos.
Para desgarranos.
Para despedazarnos.
Hembra.
En el suelo.
En el cielo.
De rodillas.
Hembra.
Hembra por fin entre tus brazos.
Hembra beso a beso.
Hembra para lobo.

jueves, 6 de junio de 2019

Colibrí 76

Desocultarme tal vez.
Desatar la furia feroz.
Sucumbir a mis tendencias.
Revelarme tal vez.
Rebelarme a la furia feroz.
Obedecer mi naturaleza.
Cantar a los gritos.
Volar en distintos tonos.
Escuchar a mi colibrí.
Porque quepo.
Pero no quepo.
Porque no quiero.
En el escondite.

Colibrí 75

Pequeña o no pequeña,
con alas o sin plumas,
con canto o sin pico,
me cuesta esconderme.
Pequeña o no pequeña,
con manos o con vuelo,
con piernas o con cielo,
me cuesta esconderme.
Pequeña o no pequeña,
colibrí o no colibrí,
mujer o no mujer,
no quiero esconderme.

Colibrí 74

Cuando era colibrí, Luna,
no sabía que estaba escondida.
Cuando era colibrí, Luna,
entendía que no me vieran.
Cuando era colibrí, Luna,
el eclipse tenía sentido.
Pero somos varón y mujer.
Pero ya no tiene sentido.
Y sigo escondida.

Colibrí 73

No soy pequeña, Luna.
Mis manos y piernas
ocupan mucho espacio.
No soy pequeña, Luna.
Sin embargo, no me ven.
Sin embargo, me esconden.
Pueden esconderme, Luna.
Dentro de unos sueños.
O detrás de la verdad.
Y callo.
Y cedo.
Y temo.

viernes, 17 de mayo de 2019

XXI

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Dejar de ver primero.
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Asustarse hoy.
"Te quiero" (21.04)
¿Eliminar para mí?
¿Eliminar para todos?
Para todos.
Eliminar el chat.
Borrar contacto.
Bloquear número.
Actual adiós.

martes, 7 de mayo de 2019

Colibrí 72

Luna. Luna. Luna.
Necesito tantos unos labios.
Unos labios que besen.
Luna. Luna. Luna.
Necesito tanto unas manos.
Unas manos que mimen.
Luna. Luna. Luna.
Necesito tanto un pecho.
Un pecho que tiemble.
Y besar.
Y mimar.
Lo.
Y temblar.

domingo, 28 de abril de 2019

Colibrí 71

Luna, llevame colibrí.
Este pecho no le alcanza.
Esas manos no me abrazan.
Luna, llevame colibrí.
Estos labios no lo llenan.
Esa boca no me serena.
Luna, llevame colibrí.
Y tal vez después vuelva.
Y tal vez después quiera que vuelva.

Colibrí 70

Tus ojos, Lobo, leen mi fortuna.
Tus ojos, Lobo, me dicen:
"Me estoy dejando querer".
Tus ojos, Lobo, leen mi suerte.
Tus ojos, Lobo, me dicen:
"Entonces, qué afortunada".
Tus ojos, Lobo, ¿me miran?
Tus ojos, Lobo, no dicen:
"Estoy enamorado".

Colibrí 69

El abismo compartido.
¿Cuántos ojos en una cama?
El abismo extendido.
¿Cuántas miradas en una cama?
El abismo inabismo.
¿Cuánto nosotros en esta cama?

Colibrí 68

Y entonces despierto
en el abismo
en la cama.
Y entonces despierto
con brazos
con boca humana.
Y entonces despierto
a besos
a ropa quitada.
Lobo, varón,
¿cuántos ojos?
¿cuántas miradas?

domingo, 31 de marzo de 2019

Colibrí 67

Hay promesa en mis venas de pájaro.
Hay promesa en mis alas inquietas.
Mi pico solo canta esa promesa.
Hay promesa en mis ojos de pájaro.
Hay promesa en mis plumas turquesas.
Mi vientre solo clama esa promesa.
Hay promesa en mi alma de pájaro.
Hay promesa en mis risas traviesas.
Mi verdor solo entiende esa promesa.
Y me dejo caer
al abismo
sin vuelo.

Colibrí 66

Mi corazón aúlla y temo.
¿Por qué aúlla, Luna?
¿Por qué no está cantando?
Mi corazón aúlla y lloro.
Luna, ¿qué pasa ahora?
¿Qué pasa entre mis alas?
Mi corazón aúlla y... Quiero.
Ay, Luna, esa promesa.
La promesa me está sangrando.

Colibrí 65

Esta noche no, Luna mía.
Esta noche no, Luna suya.
Esta noche la promesa rompo.
Me extrañan las nubes.
Me reclaman los árboles.
Esta noche la promesa ignoro.
Mi corazón trizado no sana.
Mi corazón humano no sana.
Esta noche, corazón colibrí.

sábado, 23 de marzo de 2019

Colibrí 64

Renuevo la promesa, Luna mía.
Renuevo la promesa, ojos míos.
Pico, por canto de mujer queriente.
Renuevo la promesa, Luna mía.
Renuevo la promesa, ojos míos.
Alas, por pecho de mujer queriente.
Renuevo la promesa, ojos míos.
Renuevo la promesa, Luna mía.
Vuelo, por besos de hombre lobo.

Colibrí 63

¿Cuántas veces mujer?
¿Cuántas veces pájaro?
¿Cuántas veces me quedo?
¿Cuántas veces me escapo?
Esas garras no parecen jaulas.
Esas fauces no parecen jaulas.
Todavía vuelo, todavía canto.
Todavía grito, todavía amo.
¿Y este corazón que me late?
¿Y esta jaula que me late?
De mi pecho no puedo huir.
De mi pecho no puedo escapar.

jueves, 21 de marzo de 2019

Colibrí 62

Me cabe un colibrí en la mano.
Y hay luna llena estas noches.
Me cabe un colibrí en la mano.
Y hay duda llena estas noches.
Seré pájaro fugaz de nuevo.
¿Querré volver a ser mujer?
Seré pájaro fugaz de nuevo.
¿Qué me hace titubear tanto?
Me cabe un colibrí en la mano.
Y hay luna llena estas noches.
Me cabe un colibrí en la mano.
¿Cuántos vuelos por un lobo?

sábado, 9 de marzo de 2019

Colibrí 61

Me cabe un colibrí en la mano.
Me entran cien besos en un brazo.
Me cubre un paño inmeso el cuerpo.
Tengo ahora veinte dedos sanos:
diez que pueden acariciarte;
diez que pueden soportarme.
Tengo ahora mil abrazos:
quinientos cuando hay sol;
quinientos cuando hay luna.
Tengo ahora incontables deseos:
todos susurran el nombre del lobo;
todos callan el nombre del lobo.

Colibrí 60

Luna todavía canta:

"¿Esperarlo? ¿Vas a esperarlo?
No puedo aconsejar decisión alguna.

¿Esperarlo? ¿Vas a esperarlo?
Entonces, esperalo conociéndote.

¿Esperarlo? ¿Vas a esperarlo?
No te estanques: explorate.

Si vas esperarlo, pequeño,
que la espera te humanice".

Colibrí 59

Luna canta:

"Pequeño, no quiere dañarte.
Por eso a veces parece alejarse.

Ese lobo lleva manos en el cuerpo,
pero tal vez no abandona las garras.

Y esa furia lo ciega al instante.
Y esa furia no quiere endilgarte.

Pequeño: en los labios lleva besos,
pero no olvida cómo es la mordida".

Colibrí 58

He renovado la promesa ocho veces.
No hubo vez que llegara a dudar.
No hubo vez que me asustara.
He renovado la promesa ocho veces.
De pronto, el lobo me evita.
De pronto, el lobo se aleja.
He renovado la promesa ocho veces.
La luna me inunda el alma.
La luna se escurre por mis ojos.

Colibrí 57

Menguando está la luna del cielo.
La ferocidad del lobo está menguando.
Ella aparezco en el bosque a su lado.
Menguando está la luna del cielo.
La humanidad del lobo está creciendo.
Ella me quedo en el bosque a su lado.
Menguando está la luna del cielo.
Creciendo está la desnudez de mi cuerpo.
Ella sonrío en el bosque a su lado.

Colibrí 56

No hay plumas que contar.
Tampoco hay pico cantor.
Y sin embargo vuelo.
Y sin embargo canto.
No hay alas cariñosas.
Tampoco hay pecho en flor.
Y sin embargo abrazo.
Y sin embargo florezco.
No hay forma de colibrí.
Y sin embargo hay cabellos.
Y sin embargo hay piel.
Y sin embargo hay forma de mujer.
Y, escondida en los ojos, la luna.

miércoles, 20 de febrero de 2019

Colibrí 55

Luna canta:

"No temas tanto, pequeño.
Todavía podrás cantar.

Tu voz será más potente,
tu canción será nueva.

No temas tanto, pequeño.
No es tan terrible cambiar.

Mi naturaleza me dio fases,
cambiar es mi naturaleza.

No temas tanto, pequeño.
Sobre todo, podrás amar.

Y cada noche de luna llena
renovarás o declinarás tu promesa".

Colibrí 54

Colibrí canto:

"Tengo mucho miedo, Luna,
y pensaba que no sabía temer.

Ya no hay alas que vuelen,
ya no hay pico que cante.

No sé qué hacen los lobos,
ni tampoco ser mujer.

Pero mi cuerpo ya cambió,
pero mi cuerpo ya mutaste".

domingo, 10 de febrero de 2019

Colibrí 53

Luna canta:

"Te daré carnosas piernas
y un par de brazos también.

Expandiré tus breves ojos
y mutaré tu pico en boca.

Habrá vientre, habrá pecho:
un colibrí devenido en mujer.

Y en la mirada, pequeño,
llevar mi sello te toca".

sábado, 9 de febrero de 2019

Colibrí 52

Luna, soy de carne y plumas.
Luna, te imploro:
noches nuevas,
noches menguantes,
noche crecientes.
Luna, te imploro:
quiero ser carne,
carne capaz de soportar,
de soportar su mordida.
Luna, soy de carne y plumas.
Luna, te imploro:
quiero ser carne y piel.

jueves, 7 de febrero de 2019

Colibrí 51

Te toca cantar, Lobo.
Y cantás.
Y entonces comprendo.
Qué pico largo que tengo.
A besos, Lobo.
Cerralo a besos.
Te toca cantar.
Y cantás.
Y entonces a besos, Lobo.

lunes, 4 de febrero de 2019

Colibrí 50

La fuga es pesada, Lobo:
me estás dando la espalda
para no mostrarme los dientes;
estás cerrando los ojos
para no mirarme con furia;
estás doblando las orejas
para no escuchar mi canción.
La fuga es pesada, Lobo:
ya no quiero cantar.

Colibrí 49

Escapemos, Lobo, esta noche.
Escapemos hacia el oeste,
donde mis alas puedan taparte.
Escapemos, Lobo, esta noche.
Escapemos de tantos ojos,
donde solo mis ojos puedan mirarte.
Escapemos, Lobo, esta noche.
Escapemos de tantos soles,
donde toda la Luna nos guarde.

Colibrí 48

Colibrí sigo cantando:

"Luna, sos capaz de encarnarte
para amarlo las noches menguantes.

Luna, sos capaz de encarnarte
para amarlo las noches crecientes.

Luna, sos capaz de encarnarte
para amarlo las noches nuevas.

Mis alas, mis ojos y mi pico
quieren suplirte las noches llenas".

domingo, 3 de febrero de 2019

Colibrí 47

Colibrí canto:

"Como si no fueras Luna,
me estás cuestionando.

Como si no brillaras a la una,
me estás incordiando.

Viste muchas veces sus ojos
y los hechizaste a tu antojo".

Colibrí 46

Luna canta:

"Colibrí multicolor,
les huís a otros pájaros.

Colibrí multicolor,
te buscan otros pájaros.

¿Por qué vas, entonces,
hacia esas garras feroces?".

Colibrí 45

Canta, oh Luna, la gota,
la gota que de amor
desborda mi cuerpo.
Canta, oh Luna, la ola,
la ola que de paz
desborda mi silencio.
Canta, oh Luna, y no calles
el océano que de canción
desborda mi pecho.
Canta, oh Luna, y no calles
a ese Lobo secreto,
oculto por mis alas.

viernes, 1 de febrero de 2019

El daño que me ha hecho

El daño que me ha hecho
que me quisieras tanto, tanto
que parecía que no había nadie más.

El daño que me ha hecho
que me quisieras tanto, tanto
que parecías ciega ante los demás.

El daño que me ha hecho
que me quisieras tanto, tanto
que parecía yo tu único altar.

Y no habrá ya nada
Y no habrá ya nada
Y no habrá ya nada igual.

Colibrí 44

Juguemos en el bosque, Lobo,
donde nadie nos pueda ver.
Juguemos en el bosque, Lobo,
donde la Luna pueda saber.
Juguemos en el bosque, Lobo,
a un romance clandestino:
desde tus garras a mi pico,
desde mi canto a tu gruñido.

jueves, 31 de enero de 2019

No lo querré acaso

Esa noche llegarás.
Parecerá una noche común.
Ni más luminosa,
ni más oscura que otras.
Te oiré llegar desde la cama,
una cama inmensa.
Rogarás que no despierte.
Si despertara, vería:
tus ojos culpables,
tu boca incapaz de mentir,
tus excusas delatoras.
No despertaré, entonces,
hasta que te hayas repuesto
y te hayas recostado,
dispuesto a dormir.
Abriré los ojos y voltearé.
Diré "Te amo" por última vez.
Estaré amándote por última vez.
Amaré tus aromas.
Amaré tus sonrisas.
Por última vez.
Amaré tus canciones.
Amaré tus bromas.
Por última vez.
Amaré tus carcajadas.
Amaré tus pasiones.
Por última vez.
Cuando duermas, me iré.
Me iré lejos.
Y no sabré volver.

miércoles, 30 de enero de 2019

Colibrí 43

Escondámonos, lobo.
Que no sepan.
Que no hablen.
Escondámonos, lobo.
Te incomodaría que supieran.
Te incomodaría que hablaran.
Escondeme, lobo.
Que no sepan de mí.
Que no hables de mí.

miércoles, 23 de enero de 2019

Colibrí 42

Y entonces tu abrazo.
Sucedió tu abrazo.
No esperé tu abrazo.
"No sabía que los lobos...",
dije.
"No sabía que abrazaran".
Se escapó una sonrisa
de tu boca a tus ojos,
de tu hombre a tu bestia.
Y en silencio comprendimos.

Colibrí 41

Y debajo del manto
hay todo.
Y debajo del manto
hay nada.
Y debajo del manto
todavía hay preguntas:
¿Quién te dio, Lobo,
el regalo que atesorás tanto?
¿Quién te dio, Lobo,
el regalo que veo tanto?
Y debajo del manto
todavía lloro.

martes, 15 de enero de 2019

Colibrí 40

Tus garras,
de pronto tiernas,
detienen el llanto.
Tus colmillos,
de pronto suaves,
arrancan el canto.
Tu cuerpo,
de pronto cálido,
me cobija cual manto.
Y la Luna
inmensa
incansable
intensa
te mira.

domingo, 13 de enero de 2019

Colibrí 39

Yo creí:

"Al menos los jueves va a pensar en mí".

Y le di mis jueves.
Y le confié mi secreto de los jueves.
Y le ofrecí mi espera de los jueves.
Pero no llegó:
mis alas son veloces
y veloces son mis lágrimas.
Mis ojos colibrescos lloran jueves.

viernes, 11 de enero de 2019

Hombros

Me duelen los hombros.
A veces me olvido de que existen.
Entonces, tu peso.
Tu peso muerto.
No tu peso de cuando hablás.
No tu peso de cuando reís.
No tu peso de cuando cantás.
Tu peso dormido.
Entonces, tu peso.
Cayendo
Cayéndose
Cayéndoseme
Sobre los hombros que no noto.

jueves, 3 de enero de 2019

Colibrí 38

Yo te espero los jueves,
sentado a la orilla de mí,
volando sobre la orilla de mí,
cantando en la orilla de mí.
Yo te espero los jueves,
con las alas abiertas,
con el pico dispuesto,
con los ojos partidos.
Yo te espero los jueves.
Ya es jueves.
¿Dónde estás?

miércoles, 2 de enero de 2019

Colibrí 37

Ay, Luna, diosa Luna,
soy un colibrí
y le estoy cantando a un lobo.
Ay, Luna, diosa Luna,
soy un colibrí
y no le alcanzo al lobo.
Ay, Luna, diosa Luna,
soy un colibrí
y me lastima el lobo.
¿Acaso debo huir?