martes, 23 de junio de 2020

Media Luna: 4

Muchas veces los lobos confunden a las mujeres corrientes con lunas. Pobres. No son tontos. Pero el hambre los enceguece sobremanera. Incluso lidian mal con varias circunstancias huamanas.
Es decir, terminan dotados de una voz seductora, de unas palabras adecuadas y de una buena capacidad amante. Pero son carne cobarde y ciertas emociones se les escapan de las garras.
Las lunas, en cambio, confunden a los lobos feroces con cachorros. Los amamantan y les acarician las orejas. Por supuesto, terminan mordidas y desoídas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario