los andenes de mi cabeza
noto la ventana abierta
y también escucho el tren:
al final de la calle hay una vía
en cada tramo de esa vía
hay muchos finales de calle
y acaso más autómatas
que solo oyen sorpresas
o no paran de saturarse
la vista ya pasiva y sumisa
de la que abusan a diario.
¿El tren se está yendo
o está viniendo a mis pies?
En cualquier caso se escurre
como se escurre la fecha
al final de una calle
donde no te beso.
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